Rodrigo Soto Moreno

 

A continuación sintetizamos lo que Andrés Oppenheimer recomienda en su reciente libro ¡Basta de Historias!, para que los países latinoamericanos progresen, sobre todo en materia educativa:

1. Miremos más hacia adelante.

Desde el inicio de su libro: ¡Basta de Historias!, Oppenheimer recomienda que debemos eliminar la obsesión de Latinoamérica con la historia, pues nos quita mucho tiempo para concentrarnos en el futuro.

Además nos dice el autor que debemos analizar lo que están haciendo los países que más éxito tienen, en cuanto a reducir la pobreza y aumentar la calidad de vida, para copiar esas mejores prácticas, adaptadas a nuestra situación para superarnos y en verdad mirar hacia adelante con éxito.

2. Hagamos de la educación “una tarea de todos”.

El libro nos habla de que es importante que se hagan coaliciones de organizaciones, aparte del gobierno, como lo son empresas, organizaciones no gubernamentales,  fundaciones, medios de comunicación, artistas, deportistas, entre otros, para fijar metas concretas en rendimiento académico y que se verifique el cumplimiento de las mismas.

3. Inventemos un “PIB Educativo”.

Se propone lograr medir el PIB en la educación, combinando la cantidad y la calidad de la educación en cada país. Por un lado se tendría la tasa de escolaridad de cada país y por el otro lado los resultados que se tienen en los exámenes internacionales de matemáticas, ciencia y leguaje.

Derivado de lo anterior se podría ver claramente el avance o retroceso de cada país en cuestión.

4. Invirtamos en educación preescolar.

Tomando en consideración que el cerebro de un niño es como una esponja, que absorbe todo lo que tiene a su alrededor, es muy necesario que los países trabajen en invertir a la educación preescolar, que será en el futuro la materia prima para la universidades, derivando en la competitividad internacional.

Aquí se hace énfasis en la necesidad de los gobiernos para apoyar a que las madres tengan una buena alimentación cuando están embarazadas y posteriormente ayudar a que los niños tengan una estimulación temprana en materia de ciencias.

5. Concentrémonos en formar buenos maestros.

Teniendo el ejemplo de Finlandia, los países de Latinoamérica deben preparar a buenos maestros, si es que quieren que sus estudiantes sobresalgan en los exámenes internacionales.

Otras mediciones y recomendaciones a nivel internacional, en materia educativa, señalan que para progresar en la educación de un país, se debe trabajar en tener buenos maestros en las aulas.

6. Démosles estatus social a los docente.

Se recomienda tomar el caso de Inglaterra donde se selecciona a sus maestros basados en sus conocimientos en matemáticas y lectura, así como su comunicación con los estudiantes, sus ganas de aprende y su motivación para enseñar.

Además se les deben dar sueldos adecuados para motivarlos a dar sus clases, siempre y cuando tengan el perfil adecuado. Es decir, tener maestros bien pagados y con la vocación de ser maestros.

7. Ofrezcamos incentivos salariales.

Oppenheimer recomienda negociar con los sindicatos en donde se les ofrezcan fondos adicionales si se cambia la ley en materia educativa, en donde dentro de las evaluaciones de los maestros estén ligadas al desempeño académico de sus alumnos.

8. Hagamos pactos nacionale.

Las estrategias y planes educativos deben ser transexenales y no se debe permitir que se interrumpan por cambio de partido político en el poder. Esto a razón de que, según estudios señalan, que las mejoras educativas suelen tardar 20 años en dar resultados.

9. Forjemos una cultura familiar de la educación.

La educación debe ser abrazada por la sociedad en conjunto, en donde las familias deben ser piezas claves para fomentar el estudio en sus hijos. Además, dice Oppenheimer, los científicos e ingenieros deberían de estar a la par de los deportistas y de los artistas.

10. Rompamos el aislamiento educativo.

Las universidades públicas y privadas deben establecer esquemas de intercambio con otras instituciones fuera de su país de origen, se requiere que los alumnos tengan contacto con las mejores escuelas en otras áreas del orbe, con el fin de enriquecer sus estudios.

11. Atraigamos inversiones de alta tecnología.

Los gobiernos deben trabajar con las empresas y las universidades para crear polos de atracción de inversiones, en donde la base está en crear laboratorios y centros de investigación de alta tecnología para el desarrollo de productos y servicios.

12. Formemos “Educación Internacional”.

Oppenheimer propone crear una organización internacional no gubernamental que ayuden a verificar que los países cumplas los convenios en materia educativa y protejan la educación de los alumnos, que al final del día será el mejor legado y acervo que tendrán para enfrentar la vida personal y profesional.